El escritor (The Ghost Writer)
Director: Roman Polanski. Guión: Robert Harris y Roman Polanski, sobre la novela del propio Robert Harris.  Intérpretes: Ewan McGregor, Pierce Brosnan, Kim Cattrall, Olivia Williams, Timothy Hutton, James Belushi, Tom Wilkinson, Eli Wallach, Robert Pugh. Duración: 128 m. Año: 2010. Nacionalidad: Francia, Alemania y Reino Unido.


Excelente thriller ambientado en el ámbito político, aunque circunscrito a una trama personal en la que el escritor (magnífico Ewan McGregor) encargado de escribir la autobiografía de un famoso y polémico ex primer ministro británico (sobrio y estupendo Pierce Brosnan) empieza a descubrir los secretos que llevaron a la muerte de su predecesor en el cargo de "negro", es decir, el que escribe un libro para otro sin figurar como tal ("ghost writer" en inglés). Roman Polanski, que apenas disimula a quién critica en el fondo (Tony Blair, pero también George Bush, José María Aznar...), utliza este argumento para hablar con precisión de las relaciones y luchas de poder, de las motivaciones que hay detrás de alguna que otra carrera política y de las cruciales decisiones que conllevan, basándose en la clásica confrontación del hombre solitario y sin recursos frente a los grandes poderes. Alejado siempre de la pretenciosidad, el director desarrolla un filme sólido, trufado de buenas ideas y diálogos, acción, humor irónico y personajes muy bien perfilados -entre los que destaca también la gran Olivia Williams-, con lo que recupera el brío de otros filmes similares en su carrera, como "La muerte y la doncella" (1994), "Frenético" (1988) o "Chinatown" (1974).
Cinelandia.
Hacía tiempo que no tenía la ocasión de ver un thriller, sin duda uno de los géneros en los que mejor se desenvuelve el veterano Polanski, con todos los elementos clásicos, a la vieja usanza. Trama perfectamente ligada, sin posibilidad para el espectador de perderse en trampas o giros argumentales tan habituales en el cine moderno, con ritmo narrativo, mantenimiento del suspense hasta el final y perfecta resolución. Si a eso le añades en perfecto maridaje una crítica política nada desdeñable, concretamente al triunvirato inmortalizado en las Azores (Pierce Brosnan es Tony Blair, hace ejercicio como Aznar y se aloja en Estados Unidos, al cobijo de un potentado que podría pasar por George Bush), en la que reflexiona sobre las formas de llegar al poder y lo que se puede hacer para mantenerlo de una forma tan lúcida como irónica, tenemos uno de los mejores filmes del año. Lo único que se me escapa es la presencia irrelevante de actores en un momento más bien decadente de sus carreras, como es el caso de Timothy Hutton y James Belushi, o que les viene grande el papel, léase Kim Cattrall. Pensaba que el premio a mejor director en la pasada Berlinale era un guiño a la situación personal que vive el controvertido director franco-polaco, pero de verdad que la calidad del fime lo merece; sólo espero que no le haya dado ninguna idea a Ana Rosa Quintana si está pensando en escribir otro libro, ja, ja.

Álex.