La fuente de la vida (The Fountain)
Director: Darren Aronofsky. Guión: Darren Aronofsky y Ari Handel.  Intérpretes: Hugh Jackman, Rachel Weisz, Marcello Bezina, Alexander Bisping, Ellen Burstyn, Cliff Curtis, Sean Gullette. Duración: 96 m. Año: 2006. Nacionalidad: EE.UU.


El que suscribe sigue sin salir decepcionado de ver una película de Aronofsky. Entiendo lo críptico (en este caso más bien místico) de su cine, pero tras ver "La fuente de la vida", el menos logrado de sus tres largometrajes -todo hay que decirlo- ("Pi" -1998- y "Réquiem por un sueño" -2000-), se puede decir que ha intentado abarcar demasiado. Eso de hablar de la vida y de la muerte tratando de ofrecer una respuesta concreta es cuando menos pretencioso. Y ahí cojea la película, que por lo demás se sigue más o menos bien poniéndole interés, claro está. Lo que queda patente es que el cine de Aronofsky no es fácil de digerir, pero eso no veo que sea un defecto.
Cinelandia.
Pues ni tanto ni tan calvo; la última cinta de Aronofsky no es una vergüenza ajena como para abuchearla al término de la proyección, postura mayoritaria de la crítica oficial, ni es una obra maestra que sólo el tiempo pondrá en el lugar que le corresponde, como aventuran por ahí algunos aficionados (entre los que por supuesto me encuentro). Es pretenciosa en su planteamiento, pero también original en su desarrollo (perfecta ligazón entre las historias); no es una delicia para los sentidos, pero tiene momentos excelentes con planos de una belleza y plasticidad estimables, que junto a la música suplen alguna carencia narrativa; no es fácil de digerir si te gustan los mensajes cerrados, pero estimula a buscar respuestas; Hugh Jackman y Rachel Weisz no son la mejor pareja de la historia, pero están más que dignos; el propio director por ahora no es Orson Welles, pero sabe lo que se trae entre manos y es diferente, lo cual  no es poco... En fin, ¡que para gustos los colores!

Álex.