La invasión de los ladrones de cuerpos
(Invasion Of The Body Snatchers)
Director: Don Siegel. Guión: Daniel Mainwaring, sobre la novela de Jack Finney "The Body Snatchers".  Intérpretes: Kevin MacCarthy, Dana Wynter, Larry Gates, Caroline Jones. Duración: 80 m. Año: 1956. Nacionalidad: EE.UU.


A medio camino entre el cine negro y la ciencia-ficción, esta película es un clásico en su género por la repercusión que posteriormente ha tenido (con secuelas como la buena "La invasión de los ultracuerpos" -1978-, la prescindible "Secuestradores de cuerpos" -1993- y la discreta "Invasión" -2007-), así como por el peculiar contexto en el que se creó. La historia de unas extrañas (y ya famosas) vainas de otro mundo que llegan a la Tierra y empiezan a suplantar la apariencia física de las personas, manteniendo sus recuerdos pero eliminando sus sentimientos, es utilizada por Don Siegel para hacer una sutil (o no tanto) proclama anticomunista. Era la época de la Guerra Fría y esa suplantación de la personalidad, que genera seres que creen en la igualdad y eluden el amor y el odio, es interpretada paranoicamente como el avance del comunismo en nuestros pueblos, en nuestras casas, en nuestros cuerpos... Je, je. Quizá es mejor tomarla como un producto de su época y verla como una muy eficaz serie B en el mejor sentido de la palabra, es decir, con mínimo presupuesto y máxima imaginación. Se le perdona incluso que el proceso de conversión de la vaina en el nuevo ser no esté muy definida, sobre todo en el caso de la chica protagonista.
Cinelandia.