Nuestro último verano en Escocia (What We Did On Our Holiday)
Dirección: Andy Hamilton y Guy Jenkin. Guión: Andy Hamilton y Guy Jenkin. Intérpretes: Rosamund Pike, David Tennant, Billy Connolly, Celia Imrie, Emilia Jones, Ben Miller, Amelia Bullmore, Harriet Turnbull, Bobby Smalldridge, Alexia Barlier, Imogen Toner, Kirstin Murray. Duración: 95 m. Año: 2014. Producción: Reino Unido.


Aunque está en permanente y frágil equilibrio entre el buenismo de ciertos personajes (los niños inocentes y sabios) y la mala uva de fondo (ese carácter del abuelo, ese drama familiar que se esconde tras las apariencias), "Nuestro último verano en Escocia" acaba convenciendo precisamente por esa capacidad de dar una de cal y otra de arena, y construir así una historia con suficiente gancho comercial y, al mismo tiempo, notable contenido reflexivo. Ese que nos debe llevar a considerar la desdramatización de la muerte y a tomar la vida como un trayecto en el que la dignidad, la coherencia y el amor deben ser las referencias. Por supuesto, la influencia de filmes como "Pequeña Miss Sunshine" (Jonathan Dayton y Valerie Faris, 2006) es más que evidente, a lo que se suma, en este caso, el peculiar contexto cultural británico y la presencia de grandes actores como Billy Connolly y Rosamund Pike, y ya tenemos una estupenda película.
Cinelandia.
Entre un inicio titubeante y frío, que parecía indicar el camino a una comedia de las que acaban cargando por su carácter pretendidamente inteligente y gracioso, pero sin verdadera gracia, y un final excesivamente edulcorado, se encuentra un desarrollo ágil y simpático gracias al trabajo interpretativo del abuelo y los nietos miembros de lo que ahora se viene en llamar alegremente (como bien se comenta en el propio filme) una familia disfuncional. Momentos verdaderamente divertidos que nos dejan una enseñanza que todos deberíamos tomar en serio, y es que entre la sabiduría que otorgan los años y la bondad y espontaneidad de la niñez parece que solo cabe el egoísmo y el desprecio hacia lo que y quienes nos rodean en ese esfuerzo por parecer adultos, olvidándonos de lo verdaderamente importante, la obligación de ser mejores personas a los ojos de todos aquellos que nos importan. A fuerza de ser repetitivo a estas alturas de la temporada, una opción recomendable para este periodo preveraniego escaso de ofertas atractivas en cartelera.

Álex.