Las vidas de Grace (Short Term 12)
Dirección: Destin Daniel Cretton. Guión: Destin Daniel Cretton. Intérpretes: Brie Larson, John Gallagher Jr., Stephanie Beatriz, Rami Malek, Alex Calloway, Kevin Hernandez, Lydia Du Veaux, Keith Stanfield, Frantz Turner, Kaitlyn Dever. Duración: 96 m. Año: 2013. Producción: EE.UU.


Algunas veces se consigue el raro equilibrio que permite narrar un drama dando cabida a los momentos más duros y a los más esperanzadores con la naturalidad de la vida misma. Es el caso de esta película, que, gracias a un guión muy inteligente y a unas brillantes actuaciones, cuenta con mucha fuerza y convicción las vicisitudes en un centro de acogida temporal de adolescentes. Durante el metraje, asistimos a la lucha de los cuidadores por aliviar los sufrimientos de los chavales, sin soslayar las dificultades (esa frustración por no poder hacer más), ni las imperfecciones del sistema (el jefe y sus "amistades"), ni la falta de medios (el ayudante poco preparado), mientras tratan de que eso no les afecte en su vida personal. Tarea imposible, sobre todo cuando se arrastran secuelas del pasado...
Cinelandia.
Por mucho que te guste el cine, como es mi caso, al consumir tanto es cierto que corres el riesgo de que ya nada te sorprenda, que todo te suene a visto u oído, o, lo que es lo mismo, que la comedia ya no te haga tanta gracia y que el drama no te arañe la fibra sensible como debiera. Y de ahí que muchas veces cuando me preguntan qué tipo de películas o qué género me gusta más no sepa qué decir, escudándome en lo de "cualquiera siempre que sea buena"; hasta que veo alguna como esta "Las vidas de Grace" y recuerdo la capacidad de emocionarme, de tener ganas de reír y al momento de llorar, cuando el cine es como la vida misma, eso es lo que me gusta. El filme de Destin Daniel Cretton es un verdadero torrente de emociones, desprende humanidad por los cuatro costados y más que una pequeña joya veraniega es un auténtico oasis en el desierto. Sensibilidad a flor de piel, sentido del humor inteligente, un guión certero y unas interpretaciones repletas de naturalidad son la clave de este modesto milagro cinematográfico. Como ya he dicho otras veces, sería una pena que no tuviera la repercusión que se merece...

Álex.